Nuestra
vida y nuestras decisiones en esta están marcadas y a veces decretadas por
nuestros propios prejuicios, la ignorancia completa por casi todo de lo que se
trata el existir nos lleva a prejuzgar para sentirnos bien con nosotros mismos.
Por movernos en base a prejuicios se da
que una vieja piensa que si estudias bellas artes sos un drogadicto que va a
terminar tirando un trapo en alguna plaza molestando la paz de la gente de bien
y que un estudiante de ingeniería va a terminar trabajando en la NASA y va a
salvar al mundo de un meteorito gigante cual Armagedón sin tener en cuenta que
hay que sacrificar a Bruce Willis (Pensar que todas las viejas piensan así en
su prejuicio mio, me hago cargo). Y así somos todos, el mal uso de determinados
conceptos que se utilizan comúnmente en la sociedad, es en gran parte un tema
de prejuicios, hablar de que alguien tiene cultura o no basándonos en cuantos
libros de Arjona leyó o si sabe de memoria todos los poemas de Bukowski, es producto de un prejuicio porque eso si se quiere es academicismo no cultura,
cultura tenemos todos y en general lo que la sociedad considera cultura tiene
mucho mas que ver con el estrato social al cual pertenece (si dije estrato y no
clase), esto hace que al ver a unos pendejos de la scuola italiana en un
cumpleaños de 15 bailando los wachiturros sean niños que se divierten y los que
lo hacen en coyote son un terrajas sin gusto alguno por nada de buena moral, y eso no es otra cosa que un prejuicio porque la
falta de cultura esta en nuestras
cabecitas directamente relacionada a la pobreza. Lo mismo ocurre con lo
intelectual como si una persona que no esta encerrada en una biblioteca leyendo
libros no usara el intelecto. Un problema que esto trae aparejado es el
sentido de apropiación del conocimiento, algunos de los mal llamados
intelectuales tienden a adornar su discurso para hacerlo sonar complejo y difícil
de entender, cuando en la mayoría de los casos se puede explicar claramente y compartir
ese conocimiento con otros para democratizarlo, pero no lo hacen porque en esta
sociedad eso implica en mayor o menor medida una cuotita de poder que nos pone
por encima del resto, y eso a nosotros nos encanta. Volviendo un poco a los
prejuicios, muchos de ellos no son capricho nuestro, son cuestiones sociales
instaladas, hoy en día tenemos el ejemplo de los menores infractores, tema trillado si los hay pero ante tanta contaminación
por parte de los medios masivos de comunicación no viene mal volver al
tema, hay una creencia por parte de
algunas personas que cada uno de los actos delictivos que suceden en esta aldea
convertida en país fue cometido por un menor, y que ese acto delictivo termino
en intento de o en asesinato. Pero la realidad es otra hay solo unos 400
menores infractores y de los delitos que cometen solo el 10% es contra las
personas físicas, y un 90% contra las personas espirituales, hay que entender además
el contexto en que estos jóvenes crecieron, no es fácil salir adelante cuando
de chico tuviste que ver la santa misa seguida de Italia Italia para luego
poder ver pokemon eso no es sano para ningún individuo y queda demostrado hoy. Y
también entender que cuando muestran un robo en 3 informativos diarios 4 veces
por informativo da un total de 4*3 = 12 robos cuando fue uno solo, y que cuando
hablan de mayores que delinquen les dicen jóvenes, y todo esto esta pensado y
premeditado y lo hacen con fines de lucro.
P.D: Este
blog quiere dar su más sentido pésame a la familia de Italo Colafranceschi por
la desaparición física de este pro hombre de la comunicación italiano-uruguaya.
Muy interesante el tema del saber-poder!
ResponderEliminarLos "zurdos" siempre joden con eso de que "hay que ir a la historia de los menores infractores" pero nunca pudieron precisar con claridad que hecho traumático transformó a esos "niños" en "menores".
Diego sos lo más, te amo!
Ariel "Pinocho" Sosa
Justo, justo, justo ando leyendo un ensayo de Vargas Llosa al respecto de la cultura. Y por ahora estoy enredada en este pensamiento:
ResponderEliminar"...una cosa es creer que todas las culturas merecen consideración ya que en todas hay aportes positivos a la civilización humana, y otra, muy distinta, creer que todas ellas,por el mero hecho de existir, se equivalen... La corrección política ha terminado por convencernos de que es arrogante, dogmático, colonialista y hasta racista hablar de culturas superiores e inferiores y hasta de culturas modernas y primitivas. según esta arcangélica concepción, todas las culturas, a su modo y en su circunstancia, son iguales, expresiones equivalentes de la maravillosa diversidad humana."
Hola, recién veo este blog y quería agradecerte mucho por recordar a mi padre, Italo Colafranceschi. todavía lo extrañamos mucho. Muchas gracias por el saludo.
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